Bueno, parece que tras años de lucha la sociedad empieza a darse cuenta de la importancia de la abeja en el medio ambiente y en el desarrollo económico desde una perspectiva sostenible; Justamente los principios fundacionales de ADAPAS.

COAG reivindica la apicultura como “reserva” de empleo verde y ejemplo de modelo económico sostenible

Coincidiendo con el Día internacional de la Biodiversidad (22 de mayo).

altLa labor polinizadora de las abejas es imprescindible para la formación de semillas y frutos de la mayoría de las plantas con flor, incluyendo, al menos, el 30% de los cultivos del planeta.

En España, más 5.000 apicultores profesionales prestan a la sociedad un servicio medioambiental insustituible que debe reconocerse y remunerarse.

La FAO estima que el valor de la polinización es del orden de 20 veces el valor comercial de los productos obtenidos en la colmena.

Con motivo del Día Internacional de la Biodiversidad, la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) reivindica la apicultura como “reserva” de empleo verde y ejemplo de modelo económico sostenible: la labor polinizadora de las abejas es imprescindible para la formación de semillas y frutos de la mayoría de las plantas con flor, incluyendo, al menos, el 30% de los cultivos del planeta.

Sin embargo, llama la atención que  el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino y la Fundación Biodiversidad en su informe “Empleo verde en una economía sostenible”, no hayan tenido en consideración a un sector como la apicultura, que tiene unas singulares características, al ser una actividad ganadera sostenible integrada plenamente en el medio rural, que se localiza principalmente en zonas desfavorecidas y zonas de montaña, de alto valor socioeconómico para el desarrollo rural al fijar población y que aporta a los ecosistemas una población de polinizadores, las abejas melíferas, de primera magnitud. El manto vegetal entomófilo (brezales, jarales, retamares, tomillares, romerales, pastizales, etc.) desaparecería sin este proceso y se agudizaría el creciente riesgo de erosión de los suelos.

En este sentido, desde COAG se ha reclamado por carta a la Ministra Espinosa que,  siendo un sector ganadero que encaja perfectamente dentro de los parámetros del denominado empleo verde, se reconozca el insustituible servicio medioambiental y público que prestan a la sociedad lo 5.343 apicultores profesionales que hay en nuestro país. “Una labor impagable que merece una ayuda, puesto que tal y como reconoce la propia FAO, el valor de la polinización es del orden de 20 veces el valor comercial de los productos obtenidos en la colmena”, ha subrayado José Luís González, responsable del sector apícola de COAG.

El denominado “síndrome de despoblamiento o desabejamiento” que padece la apicultura española desde la primavera de 2005, (que ha elevado la mortalidad de colmenas hasta el 25% (con picos del 40%) frente a una mortandad natural del 5 al 12% anual por explotación), obliga a potenciar la preservación de las abejas melíferas y dotar de instrumentos de bioseguridad a los apicultores que las manejan. “Porque “sin las abejas, la vida desaparecería”, tal y como afirma el  título de la última publicación editada por la Fundación Biodiversidad para difundir los beneficios del mantenimiento de la biodiversidad en la vida diaria”,  ha afirmado González.

http://www.elecodejumilla.es/2010/05/coag-reivindica-la-apicultura-como-%E2%80%9Creserva%E2%80%9D-de-empleo-verde-y-ejemplo-de-modelo-economico-sostenible/

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